sábado, 17 de mayo de 2014

LA CUEVA DEL DRAGÓN



EDITOR: EDICIONES MANALI, S.A.
DESARROLLADOR: EDICIONES MANALI, S.A.
AÑO: 1990
GÉNERO: ARCADE
SUBGÉNERO: ARCADE
IDIOMA: CASTELLANO
GRÁFICOS: CGA


Calavera a la vista.

   En La cueva del dragón nos metemos en la piel de un valeroso caballero que se ha propuesto recuperar todos los tesoros que un codicioso dragón, cual Smaug cualquiera, ha ido robando y recopilando en su guarida.

   La cueva del dragón es un claro precursor de Sword Fight y secuela, juegos de idéntica mecánica, publicados varios años después por la misma editorial, ya con el nombre de Ediciones Mago.

Hummmm.... Parece que alguien no se ha maquillado hoy.

   El método de juego es muy sencillo. Controlamos a nuestro caballero en una pantalla fija, en la que tanto por la izquierda como por la derecha aparecen una serie de criaturas que intentan acabar con nuestra vida.

   Nuestro objetivo consiste en abatir, blandiendo nuestra espada a diestra y siniestra, a todos esos seres.

   Pasado un tiempo determinado, estos enemigos dejan de aparecer, momento en el cual aparece en pantalla un indicador que nos avisa de que ya podemos acceder a la pantalla siguiente.

Frente a la guarida de la bestia.

   Como suele ser habitual en este tipo de juegos sencillotes, conforme vamos avanzando vamos siendo víctimas del ataque de un mayor número de criaturas. Criaturas que a su vez van evolucionando de manera mucho más rápida en pantalla.

    Una vez llegamos a la guarida del dragón, debemos avanzar hacia él a fin de asestarle una serie de certeros espadazos.

Recorrido completo.

ASPECTO TÉCNICO

   - GRÁFICOS: El acabado gráfico de este juego es totalmente amateur. Los fondos, realizados con trazos simples y escasa resolución, parecen sacados de alguna aventura conversacional no profesional para Amstrad CPC de mediados de los 80. En cuanto a los personajes los hay medianamente logrados, como las calaveras o incluso el dragón y otros vergonzantes, como nuestro personaje.

   - ANIMACIÓN: Este apartado es muy, muy simple, aunque bien es cierto que tal cual está planteado el juego tampoco es que sea necesario mucho más. Nuestro personaje puede caminar a izquierda y derecha, propinar espadazos y agacharse. Las criaturas , salvo las abejas, no poseen cuadros de animación, simplemente se deslizan hacia nuestra posición.

   - SONIDO: Similar al resto de juegos de Ediciones Manali. El programa ofrece una simulación (no en diferido :)) de melodía en el menú principal más unos cuantos ruidillos durante el desarrollo de la acción. Todo reproducido por el altavoz interno.

   - JUGABILIDAD: A pesar de todas sus carencias en el resto de facetas, al menos hemos de reconocer que, gracias en parte a su extrema sencillez, La cueva del dragón es un juego entretenido...... Por lo menos mientras dura. Y es que, aunque el nivel de dificultad es creciente, no llega a ser lo suficientemente elevado como para contrarrestar la escasa duración del juego, con lo que, muy probablemente, tras unas pocas partidas lograremos darle fin sin demasiados agobios. De hecho la duración del juego a duras penas llega a los 4 minutos.

   Concluyendo, podemos decir que La cueva del dragón es un programa relativamente divertido pero que se ve seriamente perjudicado por un apartado técnico muy pobre, casi amateur, y por una escasez de niveles alarmante. Lástima.

VALORACIÓN PERSONAL: 35/100

viernes, 9 de mayo de 2014

STICKYBEAR: WORD SCRAMBLE



EDITOR: OPTIMUM RESOURCES, INC.
DESARROLLADOR: OPTIMUM RESOURCES, INC.
AÑO: 1992
GÉNERO: EDUCATIVO
SUBGÉNERO: EDUCATIVO, PUZZLE
IDIOMA: INGLÉS
GRÁFICOS: CGA, EGA, VGA, TANDY 16c.


Sopa de letras, nivel medio (CGA).

   Probablemente el nombre de StickyBear a muchos nos les diga demasiado, pero StickyBear es el nombre del protagonista absoluto de una longeva serie de juegos educativos, que, aunque vio la luz en el mítico ordenador Apple II en el primer lustro de los 80, no tardó mucho en visitar (para quedarse) a nuestros PC's.

   Uno de los títulos protagonizados por este simpático oso es StickyBear: Word Scramble, juego protagonista de la review de hoy.

   StickyBear: Word Scramble es un programa que pone a prueba tanto nuestros conocimientos lingüísticos (de vocabulario para ser más exactos), como nuestras habilidades memorísticas.

Formando palabras (VGA).

   El programa está planteado en base a estancias. En cada estancia, tomando el control de StickyBear, hemos de recoger todas las estrellas que veamos, mientras evitamos entrar en contacto con cualquiera de las minas existentes. De hecho topar con una de estas minas supone una merma en nuestro nivel de energía. La partida acaba cuando este llega a cero, o bien cuando hemos superado todas las estancias.

¡Cuidado con las minas! (EGA).

   Por cada estrella recogida, el programa nos traslada a una prueba de atención, ingenio o memoria que debemos resolver en el menor tiempo posible. Existen 3 tipos de pruebas:

    a) Sopas de letras (en las que, para nuestra sorpresa, no hay palabras ocultas en diagonal, solo en en vertical u horizontal)
    b) Palabras desordenadas que debemos recomponer.
    c) Juegos de memoria en los que hemos de descubrir las parejas iguales, de los que hay de tres tipos:
       - Basados en imágenes (debemos descubrir cada pareja de dibujos idénticos)
       - Basados en palabras (debemos descubrir cada pareja de palabras iguales)
       - Mixtos (debemos descubrir cada palabra y su imagen correspondiente).

   Conforme vayamos superando estancias, el nivel de dificultad de estas pruebas se irá incrementando.

Memory (VGA).

   Mencionar también que al comienzo de cada partida podemos seleccionar el nivel de dificultad de entre tres posibles. También, desde un editor externo al programa principal, podemos crear nuestra propia base de datos de palabras para usarlas con posterioridad en el juego.

Nivel fácil (VGA).

Nivel medio (CGA).

ASPECTO TÉCNICO

  - GRÁFICOS: En cuanto a los gráficos podemos decir que si bien su grado de definición no es ninguna maravilla, en general resultan agradables debido, por una parte al buen uso de las diferentes paletas gráficas (con unas versiones EGA y VGA muy bien llevadas y una más que cumplidora versión CGA) y por otra a la destacable variedad estética de las diversas estancias.

  - ANIMACIÓN: A la animación de nuestro protagonista le falta suavidad. Podría ser mucho mejor.

  - SONIDO: No hay opción para tarjeta de audio. Todo el sonido está reproducido por el altavoz interno. Encontramos una floja melodía al arrancar el programa, más unos cuantos pitidos durante el desarrollo del mismo. Este apartado es muy mejorable.

  - JUGABILIDAD: Sin duda el punto fuerte del programa. La acertada combinación de divertidas actividades de dificultad progresiva hacen de este, un juego ameno y apto para casi todas las edades (aunque dado el público al que va dirigido, tira a facilón). Además, resulta una buena herramienta de aprendizaje para aquellos que dan sus primeros pasos con el inglés.

   Pero no todo es bueno en este apartado, ya que hay que destacar que en las distintas habitaciones, la respuesta del oso protagonista a nuestras ordenes resulta lenta. Afortunadamente, al no encontrarnos en un juego de acción, el efecto negativo no es demasiado relevante.

   En definitiva, StickyBear: Word Scramble es un desafío interesante, que aunque está especialmente indicado para niños de primaria, resulta apto para gran parte del público en general.

   La combinación de juegos de memoria, con juegos de palabras y algún tramo arcade (en las estancias) surte resultados, si bien es cierto que, a la larga, cae en la repetición y que, reiteramos, dada su naturaleza, el grado de dificultad es limitado.

   Así que, título recomendable, sobre todo para el público infantil.

  VALORACIÓN PERSONAL: 65/100

jueves, 1 de mayo de 2014

BOXEO



EDITOR: EDICIONES MANALI, S.A.
DESARROLLADOR: A.G.D.
AÑO: 1990
GÉNERO: DEPORTES
SUBGÉNERO: BOXEO
IDIOMA: CASTELLANO
GRÁFICOS: CGA


Aiinss.... Eso duele.

   Como ya mencionamos en la review de Pressing Boxing, este, no era el primer juego de boxeo creado por A.G.D. para PC, ese mérito le pertenece al título que comentamos hoy, Boxeo.

   Boxeo es un programa pugilístico de factura espartana, que nos muestra la acción desde una perspectiva cenital (cosa que trae a la memoria al clásico Boxing de la vetusta Atari 2600) y que hace alarde de una sencillez pasmosa en todos y cada uno de los aspectos que lo componen.

   De hecho los boxeadores solo pueden realizar cuatro tipos de movimientos, tres de ataque (gancho de izquierda, gancho de derecha y golpe bajo) y uno defensivo (bloqueo). Además, el único parámetro de combate que podemos alterar desde el menú es el número de asaltos (que no su duración).

K.O.

 DOS MEJOR QUE UNO

   Nuestro objetivo en el juego es ganar un combate de boxeo, y digo bien, uno.

   El juego, ni ofrece modo alguno de campeonato, ni tampoco nos da la posibilidad de ajustar el nivel de dificultad, presentando, para más inri, un único adversario bajo el control de la CPU.

¡Ganamos!

   Esto supone que en cuanto juguemos un par de partidas y nos hagamos con el control de nuestro púgil, no tardemos demasiado en acabarlo.

   Afortunadamente el programa incluye un modo que permite enfrentar a dos jugadores humanos, y es aquí donde Boxeo muestra todo su razonable potencial de diversión.

Gameplay.

ASPECTO TÉCNICO

  GRÁFICOS: Tanto el diseño como la definición de púgiles y marcadores, dentro de su sencillez, resultan convincentes. Por contra, el área de juego transmite cierta sensación de vacío y los sprites se superponen en ciertos momentos.

  ANIMACIÓN: Bastante escasa. A nuestros boxeadores les faltan cuadros de animación cuando se desplazan sobre la lona (da la sensación de que los boxeadores, más que caminar, flotan). Los golpes están más conseguidos (aunque hay pocos). El programa presenta alguna animación extra relativa a la campana.

  SONIDO: Amén del revoltijo de pitidos, a modo de melodía, del menú principal, el programa presenta un nivel sonoro solvente. Los efectos de los golpes son simples, pero tanto los sonidos de la campana como los de la cuenta atrás, están compuestos por digitalizaciones de notable factura (para estar reproducidas por el altavoz interno). Más discutible es la digitalización usada para plasmar el dolor de los púgiles al recibir un golpe (suenan a pato).

  JUGABILIDAD: El juego en sí es muy fácil de controlar (la escasez de movimientos posibles ayuda mucho). Lo malo es que, como ya hemos dejado caer, si no contamos con nadie contra él que jugar, Boxeo pierde pronto el interés, debido al único contrincante contra él que podemos pelear. Por contra, si estamos en disposición de usar el modo para dos jugadores, Boxeo se transforma en un título que ofrece una aceptable ración de añeja diversión.

   Resumiendo, Boxeo es un juego más arcade que simulador, tremendamente simple en sus planteamientos (tanto técnicos como jugables), fácil de jugar, medianamente divertido en su modalidad para dos jugadores y, probablemente, no apto para menores de 30 ;).

VALORACIÓN PERSONAL: 50/100
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